Sponien: la marca blanca de España

Últimamente hay mucho erudito del management aprendido en escuela de negocios, y mucho político saqueador que no sabe a qué agarrarse para seguir saqueando, hablando de algo a lo que llaman la marca España.

Cada vez que escucho la marca España me recuerda al triste anuncio de Campofrío y Fofito al que Plax le dedicó un post.

Me recuerda que somos un país hueco sostenido por una fachada de cartón piedra. Sostenido, mientras existieron, por las ingentes inversiones europeas saqueadas o enterradas.

Un país sin industria, sin recursos, sin investigación aplicable, sin educación válida para el mundo real... un país hueco sostenido por una fachada de cartón piedra en la que muestra su grandeza con sus paisajes, playas, copas del Mundo y de Europa, medallas deportivas... hueco como la típica guapita que no tiene más que su fachada y que se liga al millonario de turno para poder vivir del cuento.

Por todo ello es por lo que concluyo que si de verdad queremos vender una marca de España, mejor vendamos una marca blanca. Se ajusta mejor a lo que somos. Una marca de segunda, baratita, que cumple su función pero sin grandes rendimientos...

Y es que sólo desarrollando una marca no vamos a pasar de ser la leche Hacendado a ser la leche que sale directamente de la teta de una vaca... que nos alimente a todos.

Sólo siendo una marca no vamos a retener el talento que de verdad nace en Sponien y que podría convertirla en España, pero que necesita huir de este país hueco, saqueado y sin plan de futuro, para desarrollar su talento.



Con todos mis respetos.

Miniurgo.