Capitán Nazareno: El Guardián de la Sevillanía

El Farruco, ese Genio Auténtico, me regaló el pasado sábado una joya Pop en forma de cómic. El primer volumen de Capitán Nazareno: El Guardián de la Sevillanía...

   

Sólo el Farruco es capaz de encontrar algo como esto, y sólo él, en cuestión de microsegundos es capaz de relacionarlo conmigo y comprármelo.

La idea de Agustín Barrera, su autor, es brillante: un sevillanito de pro, cofrade, camarero y vestidor de su Virgen, sufre un accidente con un incenciario que lo convierte en Capitán Nazareno, el guardián de los valores sevillanos, de la sevillanía, que vigilará y cuidará desde lo alto de la Torre Pelli (a medio construir, porque el pobre Agustín ya no podía esperar más para depositar su Pop-Art: o lo depositaba o le reventaba la cabeza).

La estética, combinación lineal de Supermán, Hulk y un Nazareno de Montesión, con colores que romperían la norma cromática de cualquier boceto, salvo los de los Primaria, le da más fuerza aún a la historia. Y ese Capitán con antifaz y botines que no entraría ni en el Rockefeller, ni en el Groucho, ni con carné de socio, ni acompañado de una Pequeña Pija, le da aún más fuerza como antisevillano guardián de lo sevillano.

Y finalmente, la implementación, algo cutre tipo gacetilla de colegio, pero de estilo Pop puro, incluyendo un desplegable en el centro, tipo libro de niño de 0-3 años, es igualmente brillante. No sé si le ha salido así queriendo o de casualidad, pero lo ha clavado.

Espero ansioso un capítulo en el que Capitán Nazareno salve, de algún malandrín, a la Guardiana de lo Sevillano, a su semi-esfera:

Esta obra dentro de cincuenta años, tendrá un valor equivalente al primer volumen de Batman o Spiderman... Tiempo al tiempo.

Gracias Farruco y enhorabuena Agustín.


Con todos mis respetos.

Miniurgo.