Comienza dándole gracias a Dios por poder tenerla, y con nuevos propósitos, similares a los de año nuevo, pero más restringidos al ámbito profesional.
Pero para este curso los propósitos son simples. Muy simples. Tan simples como disfrutar. Porque solemos disfrutar poco trabajando y son muy pocos los que tienen la suerte de disfrutar de verdad con lo que hacen.
Este verano he llegado a la conclusión que disfrutar es sencillo. Sólo hay que proponérselo y ejecutarlo. En realidad no hay más. Porque aunque el ambiente sea hostil, la responsabilidad jodida y los problemas múltiples, todo contexto es una oportunidad para disfrutar, si uno lo que busca es sencillamente eso, y no el éxito, o el reconocimiento o cualquier otra cuestión que no dependa de uno mismo y que poco aporte a uno mismo, más allá de un hueco y vacío ego. Es de las cosas que me ha costado entender, forjado, como he sido, en una educación tristemente competitiva y basada en el éxito como única alternativa, como ha sido la triste y alienante educación franciscana.
Disfrutar y hacerlo con mesura dedicándome tiempo a mí, fuera del día a día, es mi proósito para este nuevo curso.
Buen curso a todos.
Con todos mis respetos,
Miniurgo.
Estupendo que hayas llegado a esa conclusión....porque por simple que sea, es muy difícil ponerla en práctica y demasiado poco lo hacemos.
ResponderEliminarUno de mis motivos para trabajar fuera era para disfrutar algo más...a mi me proporciona disfrute el conocer otra cultura y otra forma de trabajo y tener que enfrentarme a algo a priori incómodo como el reto que llevo ahora y que me está costando sacrificios personales.
Y ahora, que tenía que tomar una decisión, que estoy dando otro paso, he intentado despojarme de toda la cultura de la escalera corporativa, de puestos, nombres, etiquetas, convencionalismos, responsabilidades, éxitos y me he hecho únicamente la pregunta..."cómo crees que vas a disfrutar más de lo que haces y de cómo vas a disfrutar más en tu vida y la de tu familia?"
Y en consecuencia he decidido y seguiré fuera, en un puesto diferente, ni mejor ni peor, porque eso no lo dice el puesto, sino lo que haces con él, lo que te aporte y lo que aportas y durante unos años más, que es lo que me suele durar el "disfrute". Seguiré trabajando con gente de otras nacionalidades, estaré en culturas y economías varias, aprenderé otras cosas que creo que como persona y como profesional me enriquecerán.
En todo caso hay que buscar la forma de disfrutar en cada faceta, porque si no, te sigues sintiendo esclavo de lo que haces y eso no hace mas que corroer el cuerpo y el espíritu.
Y en el fondo y aludiendo a una conversación reciente en el Poni-chat en el que casi nos creemos que podríamos jubilarnos en 10 años....no me veo disfrutando con un trabajo de ningún tipo a los 60 años, ni siquiera a los 50, así que sigo buscando un plan que provoque cambios sustanciales en el modo de ganarme la vida.
Abrazo y a disfrutar, que a estas horas....ya estás de nuevo en el cole.