Hace unos días volví a ver La Chaqueta Metálica, una de mis películas favoritas y una de las mejores de las depositadas por Kubrick. La pasaron por la televisión a esas horas intempestivas a las que los directores de programación ubican las obras de arte, una vez los generadores de share duermen, roncan y flatulan inconscientes.
El guión, la profundidad de los diálogos, la banda sonora, el montaje, la fotografía, la interpretación... alcanzan con creces la genialidad. De las que ya, en este cutre mundo del 3D, por desgracia no se hacen.
Miniurgo.
Gran película, sí señor.
ResponderEliminarPermíteme querido Miniurgo que te dé un dato sobre ella que lei hace bien poco: todos los discursos que el gran R. Lee Ermey le da a los aspirantes a marines no tenían guión alguno. El nota los improvisaba.
Por lo visto era algo típico de Kubrick. En "El resplandor" las frases más míticas que pronuncia el gran Jack Nicholson no estaban escritas en ninguna parte.
Gran Kubrick, al que creo que fuiste tú el que ya le dedicó un gran post tiempo ha.
Abrazos.
Peliculón, sin necesidad de comentarios
ResponderEliminarApocalypsis Now y esta son las mejores películas sobre Vietnam y la psicología bélica hechas hasta ahora.
Peliculón sin paliativos. Recluta patoso siempre en nuestros corazones...relato de la existencia de los marines solo superado por la que hizo Demi Moore...¿cómo se llamaba? ;)
ResponderEliminarSin duda ninguna un peliculón. De la primera parte de la película quedan diálogos para la historia del cine, como el mítico "Pues en Texas no hay más que vacas y maricones, y tú no te pareces a una vaca".
ResponderEliminarEsta película es sencillamente brutal e imprescindible.
Qué peliculón. De los que puedes ver varias veces y siempre le descubres algún matiz nuevo. Me encanta, aunque en los de Kubrick estoy ahí ahí con Senderos de Gloria, que la he debido ver ni sé cuántas veces. Es que este hombre era un genio.
ResponderEliminarDiscrepo con Tirano respecto a Apocalipse Now. A mí me cansa tela. De la guerra de Vietnam, Tirano, te recomiendo El Cielo y la Tierra, de Oliver Stone. En su día (primera mitad de los noventa) la encontré muy dura. No la he vuelto a ver.