sábado, 5 de mayo de 2012

La Última Oportunidad... O, Au revoir Pimpoulet

Anoche volví a tener un sueño surrealista. No tenía uno desde El Mito de la Caverna Pop. Fue hace meses. Pero ha vuelto a suceder.

Recuerdo que en el sueño me despertaba súbitamente y me levantaba de la cama para ir al cuarto de baño, donde me miré en el espejo. Y no me reconocí. Se reflejaba la figura de un anciano. Pensé que no era yo. Pero lo era, y estaba brutalmente envejecido...




Y sin tiempo para reaccionar tras el shock de verme con tal aspecto, el espejo me absorbió como si fuera agua y me sumergí en un universo de fractales. Difícil de describir porque nunca jamás me había encontrado en un entorno igual. Pero recuerdo que cada elemento era una micro-macro-discoteca de música electrónica, en las que se sucedían sesiones de Chemical Brothers, Fatboy Slim, Groove Armada, Tiësto, Laurent Garnier, Paul Van Dyk, Martin Solveig, Armin van Buuren, Dash Berlin... y en las que miles de seres reducidos a fractales disfrutaban hiperbólicamte deshinibidos con la música generada desde los equipos de estos genios pomelos felices...

E iba progresando, levitando como en un universo sin gravedad, entre cada fractal electrónico, hasta llegar, súbitamente, a un espacio diferente, infinito, completamente oscuro iluminado por focos de luz rosa, ocupado por miles y miles de personas que giraban bailando, como ídos, más que hiperbólicamente deshinibidos absortos, alrededor de un escenario en el que se encontraba David Guetta... Quien irradiaba flujos de felicidad desde cada célula de su cuerpo...




 Y de repente, la música se paró, el trance se interrumpió y un foco cegador de luz blanca pura me iluminó sólo a mí. Todos se giraron hacía mí y David Guetta gritó, señalándome:

- "Quién demonios es ese viejo apagado y gris de allí?"
- "Soy yo, Miniurgo... Pero sólo tengo 37 años..." Dije con voz entrecortada.
- "Serán fisiológicos porque vitales tienes 147 años. No hay duda... En este universo fractal todos nos mostramos con la edad e intensidad vital que tenemos..." Gritó David Guetta. Tras lo cual hizo el símbolo del corazón con las dos manos, sin yo entender muy bien si se estaba quedando conmigo.
- Y a continuación, se bajó del escenario, al tiempo que desaparecía todo el mundo que hasta ese momento me miraba atónito y probablemente jodidos porque había interrumpido el trance de felicidad que hasta ese momento se vivía en ese espacio infinito y me dijo, esta vez sin gritar: "Ven conmigo pimpollo... Tenemos que hablar".

- "Ven, caminemos" Me dijo, mientras me ponía su brazo sobre mi hombro. "Minurgo, macho, qué demonios haces con tu vida? Cómo pude ser que un chaval de 37 años tenga este aspecto de 147 años y tampoca itensidd?... Tú te ríes? Te diviertes? Te lo pasas bien? Has sido siempre asi?"
- "No mucho, la verdad. Desde hace años no me río mucho. Anes muchísimo. Era jovial. Pera ahora no. Ando siempre preocupado, pensando a todas horas en el trabajo, en progresar, en crecer, en superar las expectativas, en resolverlo todo, lo mío y lo de los demás, en ser un crack, en si podré pagar la hipoteca, en si esta situación es para siempre, en si mi mujer me querrá siempre, si los niños crecerán felices, si podremos comprar un apartamento en la playa, en...".
- "Para, tío, para... No me ralles..." Me dijo David Guetta. "Puff, eres un coñazo, macho... 37 años dices que tienes? No me jodas macho... Pero tu sales por ahí con tu mujer? Sales con tus colegas? Vas al cine? Escuchas música? Vas a conciertos? Lees? Escribes? Juegas con tus hijos? viajas con tu familia? Ves a tus padres? a tus hermanas? a tus amigos?... Te cultivas tío?".
- "..." No dije nada. "..." Seguí sin decir nada.
- "Dime algo macho". Me espetó David Guetta.
- "Es que sólo trabajo. Me levanto a las 6.30h, me ducho y me voy para la oficina. Trabajo y trabajo y trabajo, de reunión en reunión, de viaje en viaje, de problema en problema, de reto en reto, gestionando a cada persona, hacia abajo, hacia arriba y hacia los lados. Llego a casa rara vez antes de las 21.30h. Acuesto a los enanos, ceno y sigo currando. Si tenso demasiado a mi mujer, a veces veo una película o una serie. Y me acuesto, nunca antes de la 1h... y vuelta a empezar. Bueno escribo en un blog, y me comunico con mis amigos por WhatsApp, y estoy leyendo, a duras penas, La Cuenta de Resultados" Dije, sin poder mirarle a la cara.
- "Con todos mis respetos, eres patético chaval... Das pena macho. Estás perdido." Me respondió mirándome a los ojos. Y dijo "Au revoir Pimpoulet..." Y desapareció.

Y tras desaparecer, el espacio en el que estaba empezó a temblar brutalmente, y dejó de ser fractal para pasar a ser un espacio infinito cegador dorado intenso...



Me quedé allí parado durante no menos de una hora. No podía moverme. Al principio no sabía dónde estaba, ni qué hacer. Ni podía. Una fuerza, supongo que tipo electromagnética, me impedía moverme del punto exacto en el que había aparecido. Pero de repente me dí cuenta que todo ello me sonaba mucho. Demasiado. Incluso recordaba haber pensado estas mismas palabras antes. Y de repente dije para mí mismo:

- "No, joder... No puede ser... Joder... No... Estoy en el No Espacio... Como en La Segunda Oportunidad... como en Mayo de 2010"


Efectivamente... Y de repente, en el mismo espacio infinito amorfo dorado cegador intenso, se aparecieron frente a mí Séneca, Lola Flores, Maradona y Zaratustra...




Pero a diferencia de aquella ocasión, esta vez fue Maradona quien tomó la palabra para decirme...

- "Minurgo... Desde la última vez que nos vimos en este mismo lugar has cambiado de nombre, sos más consciente de lo que querés, tenés más claro dónde está tu felicidad... Pero seguí siendo igual de cobarde, igual de acojonado e igual de absurdo que entonces... No nos vale que sólo lo pienses, no nos vale que tengás claro que el éxito y por tanto la felicidad, no sólo es ascender en el trabajo, sino que es llevar esa vida completa y balanceada que por fin has descubierto como alternativa en tu mente... Queremos que lo ejecutes... Queremos que pasés a la acción... Boludo de mierda..."
- "Te dimos una segunda oportunidad, pero no la has aprovechado... Solo has pensado y pensado y pensado. No tengás miedo joder. No seas un boludo de mierda..."
- "Cuando murás, al Más Allá Ininteligible no vas a llegar con una carta de recomendación de tu jefe, ni con tu matrícula de honor del proyecto fin de carrera o de COU... Sólo vas a llegar si antes de morir lo haces con una sonrisa y con un alma llena de vivencias..." 
- "Te garantizo que esta es tu última oportunidad. O cambias y empiezas a hacer algo más que trabajar para buscar la felicidad en el éxito profesional o estarás perdido para toda tu vida. Actual y Futura... Tan importante es tu éxito profesional como hacerlo desde tu éxito personal... Sé persona boludo... Sé persona..."

Y de repente, me desperté. En pelotas como hace dos años. Fui corriendo al cuarto de baño para verme en el espejo y me vi con mi aspecto de siempre. Y suspiré aliviado... Aunque jodido. Maradona, como siempre, tenía razón...

Y es que Ees hora de pasar a la acción... De hacer que mis jefes sean no sólo el actual, que también, sino especialmente Afrodita, Telémaco, Lucilo... y todos los que me queréis... porque si no, me voy a romper para siempre.. Y la cuerda de mi Alma ya no aguanta como antes..


Miniurgo.

5 comentarios:

  1. ¡Pero hazlo, coño!
    Y si me lo permites, seré tu Diego Armando particular para meterte la bulla si no es así, cada vez que nos veamos.
    Un abrazo.

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  2. Querido Miniurgo,
    Todos deberíamos hacer de vez en cuando ese autoanálisis que tú acabas de hacer de forma magistral, pararnos y poner en orden nuestra escala de prioridades.
    Cada día es una oportunidad.
    Un fuerte abrazo.

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  3. Yo no quiero ser Lola Flores así que hare de híbrido entre Guetta y Zaratrusta (Nunca podría compararme con Séneca)

    Miniurgo, tan importante como esta disección de tu espíritu es el hecho de que no podamos esperar otros dos años a un nuevo paso. Maradona no te perdonará la próxima y te pateará como un argentino lo haría con un brasilero (o ahora, con un español).

    Seguiremos ahi para zarandear tu espíritu...mientras nosotros mismos intentamos encontrar ese camino...lo haremos juntos.

    Oníricos Abrazos

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  4. Miniurgo, post de enmarcar!

    Solo darte cuenta y hacer este análisis es un paso...personalmente no creo en los grandes cambios, no creo en decisiones drásticas, en todo o nada, creo en marcar un objetivo e ir dando pasos hacia el...es evidente que estas ahi, lo tienes claro, piensa en el próximo paso hacia el destino y no en el destino....

    En parte me he sentido identificado en tu relato, yo también quiero "desprofesionalizarme"...recuerdas la película cadena perpetua? Cuando aquel viejo, brooks, estaba aterrado a salir de la cárcel, los muros y barrotes dejaron hacia tiempo de privarle de libertad y pasaron a ser su casa, los funcionarios de la prisión no eran sus captores eran su familia, allí se sentía un hombre importante, fuera no tenia nada...estaba institucionalizado. Creo que hoy y en general, nos pasa algo parecido con el trabajo, pero estamos a tiempo de cambiarlo, aun no hemos pasado 50 años como brooks y lo mas importante, fuera nos esperan personas maravillosas deseando compartir nuestro tiempo.

    Un fuerte abrazo.

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  5. Querido Miniurgo,
    Toda una lección tu pensamiento onírico...me lo aplico...
    Un abrazo!

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