Un sistema podrido...

Es sólo un ejemplo. Da igual el color político o el país. Es sólo un ejemplo.

El sistema está podrido...

Nuestro querido Bisagra decía hace unas semanas que estas elecciones habían sido un fraude y como tal correspondía anularlas y realizar unas nuevas elecciones.

No le falta razón. Pero creo que el problema va más allá. No sólo las últimas elecciones han sido un fraude. Es que el sistema supuestamente democrático actual de gobierno es un fraude.

O la administración se puebla de gestores profesionales que gestionen de forma profesional nuestros recursos y que definan planes estratégicos de sostenibilidad que nos permitan disfrutar de un escenario de estabilidad y desarrollo social, o este sistema seguirá podrido.

Y para ello, es imprescindible que los políticos, convertidos en expertos en dar discursos, en engañar y en enriquecerse, salvo honrosas excepciones, salgan de la arena... Para siempre.

El modelo que necesitamos ni lo imaginamos por lo radicalmente diferente que debe ser con respecto al actual, y por ello no somos capaces de diseñarlo ni por tanto de implementarlo.

Sigamos pensando.

Miniurgo.