martes, 20 de noviembre de 2012

Tengan cuidado ahí dentro

Queridos amigos,

Me cruzo leyendo el periódico con un artículo referido a la publicación reciente, en una revista científica americana, de un estudio que inmediatamente me ha evocado, con emoción, las novelas que Julio Verne publicó en la segunda mitad del siglo XIX, a las que soy adicto reconocido.

El estudio lo firman científicos investigadores de diferentes institutos de referencia de los Estados Unidos: la Escuela de Recursos Forestales y el Departamento de Entomología de la Universidad de Florida, el Centro de Comportamiento Biológico de la North Carolina State University, el Departamento de Ciencias de las Plantas de la Universidad de California Davis, el Instituto Cooperativo para la Investigación en Ciencias Medioambientales y el Departamento de Ecología y Biología Evolutiva de la Universidad de Colorado, y el Museo de Ciencias Naturales de Carolina del Norte.

Y su objeto, por cercano, no deja de ser tan evocador como para Verne sería un viaje submarino, a la Luna, o al centro de la Tierra: estos investigadores han explorado las profundidades abisales e inexcrutables del ombligo humano...al que describen como "jungla impenetrable"...sí, amigos...lo tenéis en http://www.plosone.org/article/info%3Adoi%2F10.1371%2Fjournal.pone.0047712#s4 ...

Por lo visto han descubierto de tó. Algunos bichos que hayan capturado, imagino que los expondrán, ya disecados, en las vitrinas del susodicho Museo de Ciencias Naturales de Carolina del Norte, para asombro y pasmo de la población. Otros, más hostiles tipo Expediente X, habrán sido convenientemente aislados junto a la última cepa de la viruela en un búnker de las Montañas Rocosas. Conociendo el percal, imagino que para ciertos estudios de caso que se hayan encontrado, habrán contado con la colaboración de la NASA para probar el Curiosity en esas profundidades, pero provisto de cortacésped, lanzallamas y contramedidas electrónicas.

Como diría nuestro querido Cabeza Destructora, tengan cuidado ahí fuera. O ya dado el caso, y visto lo visto, también tengan cuidado ahí dentro.

Abrazos

Plax

1 comentario:

  1. Jajajaja igual descubren que es la misma pelotilla que va pasando de ombligo a ombligo de toda la humanidad. Yo la solté hace tiempo, quién la tiene?

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