Mañana de domingo en Tavira...

Escribo unas breves líneas desde Tavira, desde Vilacampina, a tan sólo unas horas de regresar a la realidad...

Música clubbing de fondo, a su justo volumen. Lo suficiente para pensar, inspirándote. De frente al ordenador, el campo de olivos de la entrada. Y a mi alrededor el salón de esta acogedora casa de huéspedes. Ese al que me teletransporto cuando necesito evadirme mentalmente de la realidad. Bien planificado, bien decorado, bien aprovisionado... para la desconexión mental.

Afrodita aún duerme.

En mi cabeza, aún actúa la pomada dulcificante de dos días de descanso. La vuelta ha sido dura. Es un tópico. Pero real. Y se avecina un fin de año y arranque aún más duro. Reina el nerviosismo. El Contexto actual hace imprevisible el Contexto futuro. Es lo que nos va a tocar vivir aún unos años. La entrevista a Rubalcabato que acabo de leer en El País, me ha hecho nuevamente pensar en ello. Me ha gustado Rubalcabato en esa entrevista. Me gusta ese hombre, el único político que queda en esta España. Nos vamos a perder lo que podría ser un gran presidente del Gobierno. Una pena. Salvo milagro, así lo querrá la mayoría. Esa que no interpreta adecuadamente, lo que están haciendo sus delfinas, en los cortijitos menores para, resolver la situación?

Y en medio de estos pensamientos, me he vuelto a encerrar en el Contexto Vilacampina. Es a lo que había venido. Necesitaba oxígeno. El de Caion se me había acabado en tan sólo dos semanas.

Ahora llevo las bombonas neuronales cargadas. Y una pregunta retórica en la mente:

Por qué el Ser Humano se empeña con tanta fuerza en hacer de la Vida, de su vida, más complicada de lo que en realidad es?

Debo empezar por mí mismo. Debo empezar replicando en mi día a día los conceptos contextuales que me inspira este lugar... La mierda no existe, si no la creo yo... empezando por la de mi propio cerebro. La vida no es más que una guerra onírica de varios yo que no se ponen de acuerdo... Qué simple.

Seamos felices y arrastremos a este Planeta hacia la Felicidad. Porque es posible.


Miniurgo.