miércoles, 3 de diciembre de 2014

Tirándome a la piscina

Sí, me tiro a la piscina, porque quiero aprender. Saber qué piensan quienes leen este blog acerca de lo que voy a decir.

En esta mariana ciudad donde los Mundiales de baloncesto se anuncian en carteles con la Esperanza Macarena, el lamentable y gravísimo problema del maltrato femenino se utiliza para dar una muestra de intolerancia, en mi opinión, más trasnochada que la que supuestamente se pretende criticar.

Corriendo el lunes pasado, a la altura de Luis Montoto, me encuentro con este anuncio contra la violencia de género, que me produjo arcadas:


...y es que me parece que identificar el burka de las mujeres afganas con el maltrato es como decir que la desnudez de los indios del Amazonas es una invitación a la pornografía: sencillamente, una gilipollez. Otra de nuestro Alcalde y de su Ayuntamiento con su No8Do.

Con todos mis respetos para quienes llevando un burka sufren el maltrato, tanto como para quienes lo viven poniéndose una minifalda; no se trata de criticar una cultura, sino de denunciar actos que se producen con demasiada frecuencia en nuestra sociedad occidental de manera lamentable, por muy moderna, democrática y tolerante que nos creamos que es.

Llevaba toda la semana pensando, y quería oír vuestras opiniones. La que tengo de momento sobre esto queda aquí.

Con todos mis respetos,

Plax

9 comentarios:

  1. Por estos lares el burka es un acto aberrante.

    Tengo mis dudas si, de manera voluntaria, una musulmana quisiera llevarlo, lo haga.

    La ablación también es cultural y creo que no lo defenderías.

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  2. Por supuesto que no soy defensor de la imposición del burka, nadie en su sano juicio lo puede ser. Cuestión distinta es su uso en una campaña de malos tratos en Sevilla, donde no se ha visto uno en 10.000 km a la redonda, lo que veo totalmente innecesario. ¿QuiZá un quiebro para dar un matiz religioso a los malos tratos? Habrá que preguntar a nuestro mariano alcalde....
    Totalmente de acuerdo Plax.

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  3. Comparto todo lo que decís tanto Plax como Bisagra. Me llamó igualmente la atención ver el burka en ese anuncio, tanto por la identificación de la que Pla discrepa, como por su falta de ubicuidad en Sevilla, donde nunca he visto ninguno.
    Y sobre todo me molesta ese modo de diferenciar entre lo malo y lo bueno con lo que occidente juzga, según su criterio, al resto de lugares y culturas del mundo.
    Un abrazo.

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  4. Por supuesto que no estoy de acuerdo con la ablación. Voy por donde dicen Bisagra y Abuelo. ¿A qué vendrá que traigan el burka a una anuncio contra el maltrato en Sevilla? Vivo en esta ciudad, ando por sus calles y en mi vida he visto a nadie con burka. Por lo tanto, para mi el mensaje es xenófobo, con la excusa de denunciar el maltrato.

    Aparte está que creo completamente execrable lo que obligue a las personas a hacer algo contra su voluntad y que suponga un perjuicio para su vida. Pero tanto en la cultura islámica contra la cristiana como la budista. Por eso, no sé el porcentaje de mujeres afganas que llevan el burka contra su voluntad, como tampoco tengo datos sobre las que llevan el velo en Indonesia con desgana. Habrá también gente que se horrorice al ver las escenas de violencia que van encima de los pasos de Semana Santa...y eso se practica aquí. En todo caso, creo que la el respeto a las diferencias, que es lo que realmente aprecio como valor en nuestra sociedad, requiere mucho cuidado a la hora de emitir juicios como los que hace nuestro Alcalde con sus cartelitos.

    Por cierto, y por cambiar de tema, más banal, pero desde aquí pediría también a Zoido que deje de hacer él mismo la publicidad del Ayuntamiento en sus ratos libres con el Paintbrush...que para eso hay profesionales...lamentable el concepto, y patético el diseño también...

    Abrazo

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  5. Yo también me quedé un buen rato mirando el cartel. Abajo a la izquierda pone quién lo ha hecho, texto y dibujo, niños de IES en una campaña contra la violencia de género. Son figuritas recortables. Muestra a la mujer como una muñeca a la que se puede manejar e imponer todo. A mí me gustó el cartel, creo que transmite lo que pretende transmitir.

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  6. Muy mal vamos si la conciencia de maltrato en nuestra sociedad para mayores y jovenes, se asocia con un burka, que ni nos afecta ni lo entendemos, ni somos quien para juzgarlos.

    Supongo que es más fácil poner un burka en un recortable y no esos hombres machistas que agreden psicológicamente o verbalmente a una mujer por lo que piense o vista. De esos hay miles en muchas casas...pero claro, cómo pones eso en un recortable, no?

    Sobre lo del burka, ni opino, no me considero quien para juzgar costumbres y tradiciones que no comprendo. Viviendo en un pais musulman donde la mayoría va con traje y velo negro o con pañuelo aqui puedo entender que hay de todo. Mujeres oprimidas por el burka y mujeres que optan libremente por el velo como una cuestión cultural y religiosa.

    Se ven frecuentemente tacones y vestidos caros bajo las túnicas y muejres con vaqueros estrechos y camisetas ajustadas con velo en la cabeza, por opción propia.

    La opresión se califica en otros aspectos, como el derecho a voto o a conducir o a la educación, o a que no te casen por obligación. El tema de la vestimente, es algo más tradicional.

    No comprender algo pero juzgarlo solo demuestra ignorancia, desde mi punto de vista.

    y eso es lo que hace esta campaña...equivocar completamente el foco. El verdadero maltrato machista en España ni está en un burka ni mayormente en la prostitución...está en las casas donde el hombre agrede cada vez que algo no le gusta.

    Y eso por cierto, viene de que España es una sociedad machista. A ver cómo corrigen eso en las escuelas si ahora en un a campaña hecho por niños aparece esto.

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  7. Bueno pues ahondando en lo que dice Tirano, y hablando no ya del cartel, sino del machismo de esta sociedad, tengo que deciros que este tema me tiene últimamente muy muy cabreada. Nunca he sido una feminista al uso, quiero decir, que sabiendo lo que soy y dónde me muevo, me cansaban un poco los discursos muy feministas, porque los consideraba un poco trasnochados. Por supuesto que aún no hay igualdad, pero consideraba yo que el vocabulario clásico del feminismo echaba para atrás al personal. En el IES con los chavales ya me di cuenta que el machismo imperante en nuestra sociedad es muy sutil, está mertido hasta el corbejón en nuestra manera de ser, por eso no es fácil combatirlo. Con algunos novios que he tenido, muy modernos y muy izquierdosos de ideas, me he tenido que comer el no puedo aguantar que tú destaques en algo y yo no... no puedo con mi complejo de inferioridad... todo muy sutil. Y lo que ahora me ha hecho ver las cosas de manera clara es la maternidad. Ahora entiendo el discurso clásico, vivimos en un PATRIARCADO con letras mayúsculas, dónde hombres y mujeres consideramos normal el que la crianza de los hijos siga pesando mayoritariamente sobre las madres, dónde, por poner ejemplos de la vida cotidiana, si le dices a tus vecinas que estás cansada como nunca en tu vida, se rien diciéndote eso es así, es lo normal, te aguantas, o dónde si tu hija hace algo mal es culpa tuya y si hace algo bien es que suerte tienes con esta niña tan buena, no es que te estés dejando los cuernos para educarla de la manera mejor que entiendes, o más concreto aún, cuando sales a ver si se duerme ya de una vez la criatura de una vez por todas y no hay ni una acera en condiciones por la que se pueda pasar con un carrito de bebé. No hablo ya de las ayudas de la SS, que son de risa claro.
    Todo esto es maltrato, por parte de una sociedad como la nuestra donde las mujeres, de nuevo somos las víctimas del Gran Queo (otro programa de Canal Sur),el de incorpórate al mundo del trabajo, trabaja como una campeona, aunque vayan pasando los años tú a seguir mona y a la última, y cuando decidas tener hijos, no te quejes, que tú lo has decidido y eso es lo que te toca, eso sí, como tardes más de 2 semanas en recuperar la figura tras el parto, yastastardando. Y todo esto con una sonrisa por favor, que estás más guapa.
    Todo esto, contodosmisrespetos y admiración a los hombres que ya se han salido de ese rollo y están haciendo que cambien las cosas. Alguno que otro conozco, haberlos haylos, por Europa más que por aquí, pero bueno, ellos no tienen la herencia del macho ibérico, lo tienen una mijita más fácil. Mujeres machistas también hay, muchísimas, pero ese tema ya no me cabrea, me deprime, y ahora ya, a estas horas, me voy a acostar que tengo que seguir amamantando a mi prole.

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  8. Como ves querido Plax, nos gusta cuando te tiras a la piscina.
    Creo que no hemos observado detalladamente el cartel (hecho por adolescentes): una muñeca, unas esposas, una bola de presidiaria -con símbolo masculino-, un traje de prostituta y un burka. (Por cierto, yo vi un burka en la Macarena, por El Cerezo, mientras yo esperaba el bus, el 6 para llevarme a los Remedios, otro mundo...; no es algo tan lejano). Estaremos de acuerdo en que lo del relativismo cultural, tiene unos límites. ¿Quién los marca?. Ésa es la cuestión. La mutilación genital femenina estamos de acuerdo en que no tiene nombre ni debate. Pero si en un IES una padre dice que su niña va a clase con pañuelo o no va, ahí empiezan los debates. Sin un padre dice que su niña no hace gimnasia, porque no se pone chandal -ni hablemos de pantalón corto- porque marca la figura, hay un debate...por supuesto la madre no opina. (Ya ha ocurrido). ¿Dónde están marcadas las líneas rojas?. (Por supuesto tengo mi opinión). ¿Tiene capacidad una mujer de libre elección cuando desde chica le han dicho que tiene que ser recatada, vestir de forma sencilla, tapar su pelo...? Sinceramente creo que no. No tiene capacidad de elegir libremente (es mi opinión). Porque vivimos en una sociedad patriarcal y por tanto machista, llámese España -heredera del nacionalcatolicismo-, llámese Marruecos u otros -que interpretan el Corán de forma patriarcal e interesada para tener a la mujer en un segundo plano-. Esta campaña, llamémosla naive si queremos, ingenua pero creo que abarca más de lo que parece

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  9. La explicación de que sea un cartel hecho por chavales de un IES me cuadra completamente, y me puedo explicar la inmediatez lamentable del paralelismo, además, entre una prostituta y una mujer con burka...creo que hay en ese sentido líneas que no se deben cruzar, y esa se cruza...pero como digo, siendo un trabajo de chavales con sus prejuicios me lo puedo explicar.

    Lo que no puedo entender es que un Ayuntamiento que nos gobierna a todos, desde Los Remedios hasta El Cerezo, pueda reproducir esa visión, en mi opinión, prejuiciada, en un soporte de publicidad institucional. El testimonio de Tirano, en ese sentido, es para mí revelador, por venir de primera mano desde un país de tradición cultural musulmana. En mi opinión, cada uno puede marcar sus líneas en el relativismo cultural, tener un criterio y argumentarlo como hacemos en el blog, pero la cosa cambia completamente cuando es un Gobierno, municipal en este caso, el que habla. Ahí el relativismo cultural no existe: si realmente nos llamamos democráticos, ha de existir respeto a las diferencias por encima de todo.

    Es muy interesante lo que comentas, Marcos, de cuando esa cuestión se lleva a las aulas de un país occidental. Ahí también me gustaría aprender de lo que pensáis, porque hay multitud de opiniones que creo fundamentadas e interesantes. En los casos que comentas, pienso que en un IES una niña debe tener derecho a llevar su pañuelo si quiere, mientras que me parecería absurdo que no se pusiera chandal par hacer gimnasia, porque sencillamente es incómodo. Y dicho eso, creo que el sistema educativo debe tener flexibilidad como para permitir que una niña vaya con pañuelo y que haga deporte sin chandal si lo desea. No interfiere, en mi opinión, en el derecho a la educación de los demás niños. Ahora bien, también está la cuestión de lo que pueden o no decidir los padres, que es otra dimensión diferente del asunto, de los que podemos encontrarnos posturas absurdas e incomprensibles sin necesidad de distinguir entre musulmanes y católicos.

    Lo del machismo estructural de nuestra cultura, y de tantas otras culturas, es otra cuestión. Por la que pienso particularmente que la nuestra, que es la que conozco, en la que me muevo, tiene mucho todavía que hacer, como demuestra el comentario de Manipura, al que podríamos añadir tantos como mujeres quisieran escribir: todas se han encontrado con esos problemas, y da que pensar que nuestro mundo occidental que tanto confía en el progreso aún no haya resuelto ese conflicto. Por lo poco coherente, es realmente vergonzoso, la verdad. Y sin necesidad de hablar de burkas, que ya tenemos suficientes agravios nosotros y nuestro modernísimo sistema como para distraer la atención sobre ellos mirando hacia fuera.

    Me alegra que debatamos sobre esto. Seguiremos hablando. Que paséis un buen domingo.

    Abrazos

    Plax

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