En los últimos meses, he tenido la suerte de viajar semanalmente a Barcelona por temas laborales y sin necesidad de incidir demasiado en el tema, la conversación con casi todos los taxistas han ido en la mayoría de los casos a tratar sobre la controvertida situación de la prohibición o no de los toros en Cataluña.
Cierto es que con independencia del color político del taxista, todos coincidían en que no debía prohibirse, el daño que se le hacía a Cataluña y que esto no es más que una cortina de humo de los políticos para que el ciudadano de a pie no piense en la triste realidad que nos rodea.
La prohibición de la denomiada Fiesta Nacional (quizás éste sea el problema) sin duda tiene dos lecturas una política y otra de defensa de los animales. La referente a la defensa de los animales era la que enfrentaba a taurinos y antitaurinos, mientras la política era la que enfrentaba a patidos nacionalistas y no nacionalistas.
Todo se inicial en noviembre de 2008 con la admisión a trámite de de una iniciativa popular tras la presentación de 180.000 firmas y finaliza el 29 de julio de 2010 con la prohibición a partir del 2012.
Debo reconocer que este tema no me interesó lo más mínimo hasta hace uno días, puesto que hasta ahora, ni era un seguidor incondicional de los festejos taurinos, ni tampoco tenía nada en contra de aquellos que le gusta y mi presencia en corridas de toros no pasan más allá del Bombero Torero y una corrida en El Puerto de Santa María a la que nos invitaron a unas entradas de barrera. Reconozco el valor y mérito de los que se ponen delante del toro porque sólo de ver el tamaño de semejante bicho yo me quedaría petrificado.
Los interrogantes que planteo a mis amigos es:
En el mundo de las libertades que vivimos, ¿es necesario prohibir o vale simplemente con que el que quiera ir que vaya y el que no, que no vaya?
Si el motivo fuera estrictamente la defensa del maltrato del toro, ¿no habría que prohibirlo mundialmente o es que sólo sufren los toros en Cataluña?
Si el toro y la gitana no fueran el símbolo más característico de España, ¿se habría prohibido?
¿Qué opináis sobre los que dicen que se defiende la vida de lo toros, más que la de un no nato?
Llevándolo al terreno político, el PP se convierte en el máximo defensor de los toros, queriendo proclamarla fiesta de interés nacional, sin embargo en Canarias también se prohibieron los toros y partió de una iniciativa de un diputado popular ¿tendrá algo que ver que allí sea 1 hora menos? Lo digo por buscar algún motivo....
Los diputados de CIU y del PSC tenían libertad de voto, ¿es una medida para que sus diputados expongan sus ideas sin la coacción que supone la disciplina de voto o es una forma de "escaquearse" por si la reacción ciudadana no es la que esperan, achacando que fue una decisión individual y no de grupo?
Y la que veo más importante ¿alguien le preguntó a los ciudadanos de Cataluña?
Mañana cogeré otro avión para Barcelona y volveré a montarme en un taxi y podré conversar con gente de allí. Espero con ansiedad el tema de conversación que me tengan preparado....
Como imaginaba, el taxista esta mañana sin necesidad de sacarle el tema ha estado despotricando de la medida adoptada esgrimiendo las mermas económicas que supondrán para la comunidad y el importe que tendrán que pagar los ciudadanos en concepto de indemnizaciones y perdidas de empleo y que por tal motivo a CIU la va a votar su p....
ResponderEliminarEl día iba bien hasta que he llegado al aeropuerto y me he enterado que el avión tiene un retraso de 5 horas sin explicación.
Ustia. Pues que la espera sea leve...
ResponderEliminarYo, la verdad, es que entendo como entiende todo el mundo que detrás de esta cuestión de la prohibición se encuentran las ganas nada disimuladas de tocar un poco los cojones..en este caso los taurinos, e incluso los no taurinos.
En todo caso, creo que llegando al nivel del tocar las pelotas sin más, creo que cualquier argumento de que si Cataluña va a perder dinero representa una parte bastante marginal de la discusión. Sinceramente, y con todos mis respetos, no creo que el taxista de Barcelona sienta esa merma en sus bolsillos...
Sin embargo, sigo planteándome mis dudas, y de acuerdo con lo que dices, Juanjo. Eso de la prohibición podría haberse planteado en referéndum? Tal vez hubiera sido la manera más convincente de prohibir el asunto, si eso es lo que querían. De una forma transparente y diáfana. Pero haciéndose como se ha hecho, que si cada diputado de acuerdo con su conciencia, no deja de desprender un cierto tufillo...volviendo a una discusión previa en este blog: realmente los diputados de las cortes catalanas son representativos, en sus opiniones personales, de lo que piensa la gente en Cataluña?
Y eso que creo que de haberse hecho el referendum, hubiera ganado la prohibición igual...para mí han fallado las maneras...
Esto de los toros me parece tal gilipollez y más en la situación nacional que estamos atravesando, que confirma por completo que la Política está muerta... y que los políticos son anormales... eso sí, unos anormales muy caros...
ResponderEliminarSi yo recogo 180.000 firmas para eliminar los coches de caballos de Sevilla que estorban el trafico y a mi no me gustan....los quitarán?
ResponderEliminarpuedo votar quitar lo que me de la gana?
considerarán los coches de caballos un bien cultural de arraigo social?
Yo no soy fan de los toros, pero los identifico con la cultura y la sociedad española, por lo que no creo que se pueda prohibir sin mas...maltrato al toro? qué sabran los que piden las firmas...yo creo que son tocahuevos que no tienen mejor cosa que hacer y que usan el tema del estatut...
a mi juicio un pésimo show en los dias que corren
La verdad es que estoy de acuerdo en que este es un tema estúpido que surge cuando se juntan Carodes y Laportas que lo que odian es a España, y no al toro.
ResponderEliminarQue a CIU le va a costar caro, no creo. Porque el PSC tampoco se ha posicionado por la libertad, así que el taurino tampoco tiene otro al que votar que no sea al PP, así que votará lo que le dé la gana.
Me hizo gracia de todo esto lo de que el PSC daba (excepcionalmente) libertad de voto. Si el resto de veces no la da, ¿para qué tanto diputado? Que se repartan participaciones en las elecciones, no escaños.
Con todos mis respetos, Juanjo, la opinión del taxista no me parece significativa, porque seguro que si recoge a un nota en Lérida se pone a hablarle en catalán y a despotricar contra la "caverna españolista impositoras". Son personajes que suelen decir lo que el cliente quiere escuchar.