martes, 3 de agosto de 2010

Sufre Mamón

Soy consciente de que la confesión que voy a realizar dentro de un microsegundo, puede levantar una polvareda inaspirable... Pero soy valiente y me voy a arriesgar.

Quiero confesar, con todos mis respetos a mi propio gusto sonoro audiovisual, y a mis propios conceptos creativos y artísticos que me gusta la película Sufre Mamón de Hombres G... ese grupo de estilo pop chicloso de estridencias agudas que en los 80 arrasaba entre las niñas, más por estética y marketing Súper Pop que por su genialidad en el encadenamiento de acordes.

La película, dirigida por el súper creativo Manuel Summers, director de las míticas To er mundo é güeno, To er mundo é... mejó!, To er mundo é demasiao, La Biblia en pasta, Me hace falta un bigote... es un auténtico bodrio. Es una grabación minimalista y arcaica tipo formato familiar, más apta para reproducir en CinExin en las cenas familiares de nochevieja en las que debían coincidir David y Manuel que en las salas de cine comercial.

Durante años he responsabilizado a mi hermana Ali de esta situación inconfesable. Y es que le dio por grabar esta película y como ella era muy cosntante y cuando le daba por una película la repetía en un bucle infinito hasta desintegrar la cinta en el videoreporductor, nos torturaba y castigaba con ella fin de semana tras fin de semana. Y esto me llevó a defender la teoría que después de visionarla más de mil millones de veces, junto con Grease, Cry Baby, y todos los capítulos de Oliver y Benji... debió romper las defensas culturales de mi cerebelo, debió instalar un virus en mi sistema cognitivo y se debió quedar parasitando sinapsis y huecos de memoria... hasta conseguir gustarme.

Pero con el tiempo he llegado a comprender que esta teoría no es cierta y que en realidad me gusta Sufre Mamón porque ese bodrio de película desarrolla una Epopeya de unos PoNi (cantantes de Pop chicloso de estridencias agudas) convertidos en PuMa (amacarrados con sus chupas de cuero a lo Mr. Hyde) para superar de modo épico la problemática boqueroniana que todo adolescente PoNi ha sufrido y que le ha llevado a no comerse un colín porque siempre elegía a la niña equivocada. Todo PoNi ha sufrido amargamente un largo boqueronismo porque un pijo le ha robado su amor platónico y noche tras noche, ha rumiado el modo de vengarse de ese pijo marica... sin atreverse...





Y es que esta película desarrolla la letra de una canción que es la canción de lo que fue nuestra vida adolescente de los primeros años de BUP... al menos de los míos.

Han vuelto para recordarla, pero creo que a los NiNi ya no les hace falta...





El Miniyo del Demiurgo.

1 comentario:

  1. Miniyo, has tocado en cielo con sufre mamón..nunca nadie se hubiera atrevido a señalarlo como himno generacional, hasta que has traído el vídeo, y sobre todo, compaginado cob la letra..ese ford fiesta blanco XR2, la chaqueta de beisbol del colega..qué documento más mitológico..lo que necesitaba después de contaminar mi mente con la historia del astronauta..

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