domingo, 10 de enero de 2010

Reflexión-Evolución

Gracias, estimado Plax, por tu aportación y reflexión en forma de carta abierta que por encima de todo agradezco, y que además me ofrece muchas ideas interesantes…

Lo agradezco porque todas las reflexiones, vistas de forma abierta y sin prejuicios (originados por nuestra condición intelectual, moral, religiosa, familiar, profesional, gremial, social) nos deberían ayudar a pensar… se comparta o no el contenido… y en ocasiones, si se dan las circunstancias para ello, a evolucionar, al menos mentalmente (no aspiro desde esta plataforma al objetivo utópico de cambiar el Mundo… ya estoy en la mitad de la treintena)…

Pero quiero seguir compartiendo con vosotros más reflexiones ¿La evolución no sería un proceso consistente en estar alerta sobre lo que no funciona, analizar permanentemente la realidad del Hoy, visionar una atisbo de situación ideal, desencadenar una sucesión de reflexiones que creen la suficiente inquietud sobre los sujetos que deben evolucionar, cerrar una solución evolutiva suficientemente madurada y consensuada por una masa crítica de estos sujetos (nadie tiene la respuesta única sobre nada), hacer que esta masa crítica empuje el cambio con sus acciones, de un modo planificado? Recomiendo a John Kotter antes de responder…

Inquietud, Análisis del Hoy, Visión, Reflexión Conjunta, Consenso, Planificación y Acción… ¿los principios básicos de toda Evolución que implique a las personas como sujetos? sea ésta incremental (en el contexto que estamos debatiendo, y siguiendo tus ejemplos el voto a las mujeres) o revolucionaria (siempre en el mismo contexto que estamos debatiendo la Revolución Francesa, o finalmente la superación de nuestro actual orden político, origen de mi inquietud).

Hecha esta introducción, debo indicarte que yo no he defendido ningún posicionamiento, porque tal y como indicaba en mi post “País S.A.” aún no tengo ninguna teoría, y por tanto ningún posicionamiento… sólo puedo ofrecer reflexiones inconexas…

Y eso es lo que he hecho: sólo he lanzado dos definiciones literales de la RAE, una serie de preguntas y dos comentarios…

Esto hace que no se me pueda juzgar sobre la idoneidad, y mucho menos sobre la viabilidad, de ningún argumento aún no expuesto, y por tanto no se me puede atribuir ningún posicionamiento sobre la vigencia de la libertad y la individualidad como paradigmas de la sociedad occidental, ni sobre…

Porque no me he posicionado aún al respecto… es necesario una mayor profundidad, porque ninguna teoría individual de ningún aspirante a sabio, incluido Yona Friedman, es aún suficiente por sí sola, para lograr un consenso que cierre ninguna teoría ni proceso transformador planificado que motive la acción social que pueda conducir a una verdadera evolución…

Pero en tus reflexiones, aún con el insomnio, y con todos mis respetos hacia el Mundo de las Ideas, hay muchas buenas ideas, siempre en mi opinión… Pero ideas que me hacen pensar más en los Cómos que en los Qués… y aún no tengo claro el Qué…

Cómo se ofrezca la opinión, cómo se ayude a los gestores, cómo se intercambien los bienes tangibles o intangibles como el know-how, las bondades de la tecnología, la interconexiones neuronales sociales o telemáticas… son muchos gérmenes de los Cómos…
Mi reflexión está aún más en el origen: ¿Qué modelo es el adecuado para gestionar una Sociedad?

¿Qué me ha llevado a pensar en la Tecnocracia? (Sin enunciar ninguna Teoría aún)

1. Pensar en la unidad familiar ¿La unidad mínima Social sobre la que se sustenta la Sociedad?... en una familia, imaginemos de 15 miembros ya adultos y entre los que existe un economista, un médico, un industrial, un arquitecto… (ninguno se ha independizado aún pero todos cuentan con más de 18 años… aunque sea muy forzado por favor imaginádlo):

¿Cómo se asignarían las tareas? ¿Quién asumiría las responsabilidades y decisiones de cada cuestión? ¿Cómo se tomarían las decisiones? ¿Todas las opiniones pesarían lo mismo?

2. Pensar en las empresas ¿La unidad mínima económica sobre la que se sustenta la Economía de un País? (Sin olvidar su dimensión social)

¿Cómo se asignarían las tareas? ¿Quién asumiría las responsabilidades y decisiones de cada cuestión? ¿Cómo se tomarían las decisiones? ¿Todas las opiniones pesarían lo mismo?

3. ¿No es un país en lo social y en lo económico un sumatorio de sus unidades mínimas? ¿Por qué cambiar de conceptos?

Los Cómos, los riesgos, los procesos de todo tipo y para todo, las capacidades… Todo eso no es tan simple, pero primero es el Qué… y el modelo actual basado en incompetentes en la materia decidiendo sobre cuestiones fuera de su competencia, y por tanto desde su incompetencia, y por tanto suplantando a los verdaderamente competentes no me convence… así como tampoco el de todos desde casa conectados a Facebook o Twenti o un posible “Politikis” decidiendo… gracias a la bondad de las redes neuronales telemáticas facilitadas por los diseños urbanísticos concebidos para facilitar la gobernanza ciudadana tampoco, la verdad, tampoco.

Finalmente una última reflexión:
Un País es un sistema tan sumamente complejo que para resolverlo se necesitan muchas ecuaciones con muchas incógnitas cada una de ellas. Cuánto más simple hagamos las ecuaciones, y por tanto, cuánto más dividamos el sistema y más lo aproximemos a ecuaciones simples ¿más fácil será resolverlo?

Por ello, dejo para más adelante profundizar en mi símil entre País-Empresa, y en cómo con independencia de cuál sea el modelo de gestión del mismo, conceptos y modelos asociados a la estrategia empresarial (no a la maximización del beneficio, sino a la Misión, Posicionamiento, Diferenciación, Capacidades, Procesos, Inversión…) ¿son los que nos podrían sacar del atolladero en el que sucesivamente González, Aznar y Zapatero nos han metido?

Que siga la reflexión… sumando…

El Miniyo del Demiurgo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario