lunes, 20 de enero de 2014

Ese otro lugar

Quedan muchas horas de viaje, de avión, demasiadas como para no pensar que volvemos a ese lugar.

Volvemos a ese lugar donde los segundos parecen horas y donde cada día que pasamos, nos quitan años de vida.

Volvemos a ese otro lugar donde nunca debieras estar, donde nadie sueña con ir y del que todos quieren regresar, por el que pasar más de ninguna vez, es un infierno para los que te quieren.

Un lugar donde te separan de mi, donde mi control, mi suficiencia, mi obsesión, mi empuje, no sirven de nada.

Un lugar donde el tiempo se estira, se retuerce mientras me siento desnudo, deprotegido, temeroso, agarrándome a la fé de que otros hagan lo que tienen que hacer y que el azar no intervenga más de lo que lo ha hecho. Un agujero negro que lo traga todo y hace que el universo se pare.

Un lugar donde lo más que puedo hacer es pasear millas, vidas, bindado mi cabeza de pensamientos, suposiciones, conjeturas vagas e inútiles, inevitables, pesimistas.

Un lugar donde solo puedo armarme de fuerza, de tensión, de equilibrio, de serenidad para mi y para los que piensan en ti.

Un lugar donde, aunque tu creas que es un juego, sabes que algo pasa, que nunca recordarás, pero que siempre te marcará.

Un lugar que para ti no está cerrado, que tiene ventanas que tu ya has abierto y puertas por las que has vuelto, que conoces bien y que te hacen cada vez más fuerte.

Un lugar del que siempre sales con una sonrisa que ilumina lo que toca, que genera lágrimas de felicidad, que se llevan la amargura.

Un lugar del que vas a salir, un lugar donde no estarás sola, un lugar donde estaremos todos contigo.


3 comentarios:

  1. Yo estoy con vosotros en ese lugar.
    Un abrazo fuerte, hermano. Todo irá bien.

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  2. Ya pasó, Tirano, ya pasó. Todo sirve al final para valorar lo importante.
    Un fuerte abrazo.

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  3. Que se recupere pronto, querido Tirano. Es fuerte y alegre. Espero que estéis pronto en casa. Un abrazo.

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