viernes, 19 de abril de 2013

Las Tíasbuenas

Estimados todos, esta Feria ha servido, entre otras cosas, para confirmar una teoría que ya anticipaba hace unas semanas y es que la especie humana definitivamente se ha segregado en dos. Por un lado la de los seres humanos (nosotros los hombres) y por otro la de las Tíasbuenas.

Y es que, estimados todos, definitvamente constatamos que todas las tías, y cuando digo todas es todas, ya están buenas.

Sin excepciones. Ya no hay cocos.

La dermoestética, los maquillajes, los restylanes, la moda provocadora... todos estos factores adecuada e inteligentemente combinados, como sólo han sabido hacer todas las mujeres de nuestro Planeta, han contribuido a que todas ellas, sin excepción, hayan conseguido contrarrestar puntos débiles para estar indiscutiblemente buenas.

Que el pecho es pequeño, silicona. Que los labios sin chicha, restylane. Que los pómulos inexistentes, más restylane. Que el pelo de color saborío, tinte y peluquero de moda. Que el culo caido, operación al canto. Que hay que reforzar curvas y resaltar lo resaltable, pues pantalones estrechos, leggings, shorts, putifaldas, escotes... Que la cara necesita brillo, cosmética por un tubo... Todos los posibles desperfectos fríamente analizados para ser reparados. La inteligencia humana al servicio de ellas.

Antes había mujeres de todos los tipos: pibones, guapas, normales, gambas, agradables de ver, feas, horribles, tremendamente horribles, cocos... Pero esto ya sólo ocurre con los hombres, porque las mujeres han conseguido utilizar los inventos de la inteligencia humana para combinarlos a su favor, elevarse genéticamente y evolucionar hacia una nueva especie superior de Tíasbuenas.

Sólo aclarar que esto no es una paranoia fruto de un desierto sexual, que no es el caso. Es una certeza empíricamente demostrable y una oda a las mujeres que se lo merecen todo, especialmente por aguantarnos a nosotros.

Y sólo me queda decir que bravo por ellas y su divina evolución. Aquí los seres humanos que nos quedamos en el bando de los normales, como no espabilemos, nos queda una dura involución... A ver dónde llegamos.


Con todos mis respetos.

Minurgo.

3 comentarios:

  1. Miniurgo, resiste, lo de la Feria es un espejismo: Mezcla el traje de gitana (que nos favorece tremendamente a todas, aunque estés hecha un tonel), la ingesta de alcohol y la llegada del buen tiempo: el empezar a ver algo de piel revoluciona a cualquiera

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  2. Lo del traje de gitana es verdad: a casi todas les sienta estupendamente.

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