miércoles, 14 de abril de 2010

Juguetes del pasado ¿o no?

Como veo que el blog ha quedado un tanto decaído con los sucesos de los últimos días, os voy a contar una historia totalmente verídica que me pasó ayer y así inauguro mi aportación al blog.

Estos días de Semana Santa, mi cuñada ha estado en los EEUU. El fin de semana me dio el regalito que me había traído de aquellas tierras,… un llavero con un diminuto cubo de Rubik (que seguro se puede comprar en cualquier tienda española, supongo)… Los que me conocéis os podéis imaginar mi cara de asco al recibir aquel presente.

Por supuesto, lo primero que pensé fue “Valiente tía cutre, vaya porquería que me ha comprado, para esto, mejor me trae un llavero con la Estatua de La Libertad, al menos es típico de allí”.

El susodicho cubito estuvo más de 72 horas en el sitio exacto donde lo coloqué (o mejor donde lo dejé caer). Sin embargo, la curiosidad es una de las virtudes o defectos de la condición humana (al menos del que os escribe) y no pude resistir la tentación de echar una miradita y desordenarlo “un poquito” del dichoso cubito.

Pese a que el desorden del cubito fue sólo un poquito, la entropía (palabra muy usada en este blog) del mismo cada vez iba a más y lo que se inició como una simple curiosidad, desembocó en horas y horas de abstinencia (de cualquier tipo). Mientras me encontraba inmerso en su resolución y reflexionaba en ese sitio de la casa donde a los hombres nos gusta reflexionar tranquilamente, no pude más que retrotraerme muchos años atrás con el tipo de juguetes que teníamos en nuestra infancia.

Antes de volver a los juguetes de nuestra infancia, no tiene ni que decir que tras muchas horas de lucha, sólo fui capaz de hacer una cara y un poco de otra, mientras que recordaba que en mi infancia era capaz de hacer hasta 2 caras o 3, sin necesidad de recurrir a quitar las pegatinas o desmontar las piezas y volver a montarlas (que era en la mayoría de los casos).

Volviendo a los juguetes de la infancia, haciendo una lista no exhaustiva de juguetes que llegan a mi memoria tendríamos: el cubito, Simon, enredo, magia borrás, yoyo, juegos reunidos sin contar con las pelotas, coches,…. Y pienso, ¿no son casi los mismos que hay ahora pero con carátulas renovadas? La única diferencia es que ahora si el yoyo o el cubito llevan además una pegatina de Hello Kitty, Bob Esponja o Los Lunis cuestan 4 veces más.

Con los años y el progreso, llegaron los Spectrum (los más avanzados como el abuelo tenían el 128 K). 128 K es lo que ocupa hoy un e-mail de los cortitos sin documentos adjuntos!!!! Pero ¡¡¡Qué felices éramos!!! Nos llevábamos 30 minutos viendo líneas horizontales de diferentes colores y con un sonido de lo más desagradable, mientras vigilábamos el volumen exacto de la cinta en el radiocasete (si el sonido era más o menos alto que el “debido”, el programa no cargaba, algo que tras años de estudio sigo sin entender). Cinta por supuesto que previamente habíamos rebobinado con un boli bic (diseñados con la forma exacta para que entrara por los orificios de las cintas) para no correr el riesgo de quedarnos sin pilas en el radiocasete (no había pilas que duraran más de 2 rebobinados). Si eras hábil en el manejo de la computadora (vamos a ponernos antiguos), podría darse el caso de tener la gran suerte de tener que cargar una nueva fase (otra media hora de espera e igual proceso), para al final “matarte” a las primeras de cambio y tener que volver a cargar la fase I. Conclusión, después de 2,5 horas de juego, te llevabas media hora montando el ordenador, otra media frustrado porque no te cargaban los juegos, 1 hora cargando los juegos y realmente jugando media hora (eso si tenías suerte y no se calentaba la tele, que es para otra historia).

En definitiva, en nuestra infancia no éramos adictos a los ordenadores, porque era imposible, además de que entre tiempo de carga y carga nos daba tiempo a hacer de sobra los deberes, por lo que era perfectamente posible la conciliación de la vida escolar y lúdica.

Como resumen, lo felices que éramos de chicos con lo poquito que teníamos, lo que ahorrábamos en pilas y la de trucos que aprendimos.

PD: como no podía ser de otra forma, hoy me he metido en Internet para buscar los trucos para resolver el susodicho cubito. Hoy no pierdo ni una hora más de sueño!!!!

Abrazos.

6 comentarios:

  1. Dios mío...el estreno de Juanjo...creo que de forma intencionada, ha elegido el 79 aniversario de la República...eso es talante, coño!
    ;)

    Una vez repuesto del shock y de la alegría del reencuentro, escribiré el pertinente comentario.

    Esto es un pequeño paso para Juanjo, pero un gran paso para el Blog...

    Abrazos

    ResponderEliminar
  2. Illo Juanjo, no le dejes ver a Paula el blog o se va a mosquear con la que le has dado a su hermana.

    Por otro lado, me ha traíado grandes recuerdos tu post. Me he visto rebobinando, efectivamente con el boli bic, una cinta para poner un juego del spectrum que había comprado un domingo en la Alameda con el Plata (ahora Willy, ni yo sé muy bien porqué).

    Cómo no, al final te picaste con el cubito y casi te cuesta una o varias hemorroides.

    Pero desengáñate: tu cerebro, como el mío y el de todos, no es el mismo con la edad.

    Sólo decirte que el otro día no fuí capaz de saber si el Barça ya había jugado con el Valencia esta liga en el Camp Nou. ¡No me acordaba! El Alzheimer nos pisa los talones....

    Abrazos del abuelo.

    ResponderEliminar
  3. Para ser original me compre un Philips MSX... con pantalla de fosforo verde... y solo me dejaban conectarlo en las vacaciones...

    ResponderEliminar
  4. Grandísimo post, Juanjo...al final, ese tipo de regalos, terminan dando un juego considerable, creo que por una cuestión puramente nostálgica.

    En mi caso, fui yo mismo quien pidió hace cinco años ya el dichoso cubo de Rubik, que para mí constituye, junto al Simón, una pieza fundamental dentro de la conformación mental del PoNi.

    Y por qué? Veremos. El cubo diabólico fue en su momento el pequeño objeto que revolucionó el planeta. Lo había creado un profesor checo, que de la noche a la mañana, saltó el Telón de Acero para instalar su estética de juguete del bloque socialista, de la que el Abuelo es un declarado fan, en las vidas del enemigo declarado, de los países occidentales, donde a causa de las diferencias en los sistemas educativos, se tardaba una media de 18 meses en resolver dos caras contiguas, mientras que los niños de Leningrado y Vladivostok se los plimplaban en cero tres segundos.

    Qué ocurrió en España, vivero mundial de la generación PoNi? Pues que si en otros países como Alemania y Japón, el hecho de no poder resolver el acertijo matemático derivaba en depresiones infantiles y en un aumento de psicólogos y psiquiatras escolares (insisto, el acertijo era inasumible para una mente humana infantil capitalista), en España se insertaba en un contexto en el cual la Bola de Cristal ya te había aleccionado sobre cómo desaprender a desenseñar cómo se deshacen las cosas.

    Acto seguido, cuando al cachorro de PoNi ibérico le ponían en sus manos el reto de invertir la entropía del universo, condensado en esa matriz espacial 3x3x3, después de varios intentos infructuosos, de tirarlo al suelo, y de mirarlo fijamente, caía en el más profundo de los Nihilismos..."Total, si no voy a poder invertir la entropía de esta mierda cubo colores, qué voy a hacer yo en mi vida?"...

    Con la diferencia de que en nuestro caso, esa impotencia no derivaba en depresiones infantiles y un aumento de la tasa de abadono escolar. Al segundo día, los cachorros PoNis cogíamos el cubo, le quitábamos las pegatinas, componíamos un, a nuestro parecer, complejísimo mosaico espacial de colores, y nos quedábamos tan satisfechos: "vamos, que me iba a echar cojones el mierda cubo A MÍ"

    Pero eso ya fue el Pomelismo. El creernos que eso era la solución, y quedarnos tan panchos viendo el resultado de nuestra trampa. Tal vez, aquellos que terminásteis estudiando ingeniería, os metísteis a desncajarlo, a estudiar su mecánica, a recomponerlo...para, al final, tener el mismo resultado. Quedarnos contentos como Pomelos.

    PoNis...Pomelos Nihilistas gracias al profesor Rubik y al influjo inenarrable de la bruja Avería. Gracias Juanjo por arrojar luz sobre nuestros orígenes con este revelador post.

    Abrazos

    ResponderEliminar
  5. Viene al caso que ponga un comentario aqui y no ya por el esperadisimo estreno de JJ, sino porque hablais del telon de acero y aqui estoy...en la Sala Vip de un aeropuerto de disegno de Moscu...hay mayor contrasentido?si Lenin levantara la cabeza, lo derrumbaba.

    Por cierto como anecdota me han hecho un escaner de cuerpo entero de esos polemicos dos policias (femeninas) y luego una de ellas me ha cacheado a fondo...no se si va con la clase business, con el comunismo o con que..pero no ha estado mal :)

    bueno a lo que iba..el cubo de Rubik...yo me pase al Spectrum (el primero mio era de 48K)...porque el Cubo de Rubik era una mierda y solo servia para oprimir al pueblo..como el tetris

    Estaba cansado de ver como todos haciais el puto cubo en 1 hora *ahora descubro que cambiabais las pegatinas cabrones) asi que quise ir mas alla y le pedi a mi madre un paso mas alla que no se si recordareis...el cubo de rubik 3D creo que se llamaba.

    Era una tira de metacrilato articulada con la ilustracion de uinas anillas enganchadas entre si..lo movias un poco y luego habia que volver a la configuracion original.

    Bueno pues lo descuajeringue' y aquello no habia Dios que lo hiciera..mis primos, mi padre, nadie...un artilugio del demonio. Menos mal que mi madre es lo mas y es capaz de descambiar en el Corte Ingles lo que sea...ylo descambiamos tal cual.

    Desde entonces, el Tetris, el Rubik, la cuchara que se doblaba de Uri Geller, todo dejo de tener sentido.

    Me dedique a los videojuegos y el ordenador...mitico Vectrex, nadie se acordara de el, aunque lo guardo como reliquia.

    Ponis...yo era un hacha en el pale' (version espagnola del Monopoly)...creia que iba a ser un ricachon speculador ysoy un poni con aspiraciones de la generacion H(ipoteca)

    ResponderEliminar
  6. Querido Tirano,

    Veo por tu comentario que tú, hombre de mundo, no sé realmente si el tema de loa cacheos en los aeropuertos de la antigua esfera soviética te los encuentras..o si realmente los buscas.

    Estoy esperando el momento que nos veamos en Feria para que nos cuentes en directo el tema del cacheo integral, para descojonarnos en el acto..

    Y una pregunta que me llega de repente: No estarás haciendo de intermediario de nuestro amigo osorno para su "club liberal"????

    Vas sólo a ver personal, o a contratar?

    A qué te has estado refiriendo últimamente cuando decías que ibas de viaje, a Qatar o a Catar??

    ResponderEliminar