domingo, 21 de noviembre de 2010

El Paramundo de SuperLópez

Un día cualquiera de principios de los 80, mi abuela Isabel que en paz descanse, me llevó a un kiosko de prensa a comprar un TBO. De entre todos los allí disponibles, elegí el siguiente...





Y a partir de ese preciso instante, estoy convencido que mi desarrollo psicológico se vió alterado por el descubrimiento de la maravilla que esa inocente cubierta de TBO encerraba.

Y es que nada puede ser igual después del descubrimiento de Superlópez, o Jo-Con-Él, el superhéroe nacido en el planeta Chitón, llegado a la Tierra como Superman, siendo bebé en una nave espacial, para ser adoptado bajo el nombre de Juan López Fernández por una pareja de ancianos catalanes, residentes en Barcelona.

Superlópez es el protagonista de un paramundo tan surrealista como divertido, en el que la parodia de Superman pasa a un segundísimo plano. Paramundo auténtico en el que cada elemento de nuestro mundo tiene un reflejo transformado, obra del Demiurgo Jan: Parchelona F.C, Fespañol, Tronak el Kárbaro, Brut Kanlaster, Al Trapone, Lolaspaña, Stupend Kong, Falencia, Nipón... Y en el que incluso el lenguaje es una versión alternativa de nuestro lenguaje real.

A este TBO siguieron otros muchos, que me fueron introduciendo cada vez más en el paramundo de SuperLópez, sintiéndome parte de él. Quizá no haya crecido aún lo suficiente y es por eso que no consigo, o simplemente no quiero, salir de él, y contribuyo modestamente (como Miniyo que soy) con el Demiurgo Jan, a hacerlo crecer con personajes como El Chocolatinas, Zerebro Pez, Rallando Voy, Lerele Pajote...

El Miniyo del Demiurgo.

2 comentarios:

  1. Espectacular Miniyo...y sobre todo, el énfasis en en carácter de este personaje, criado por una pareja de ancianos en la Barselona de los 70...teniendo como vecino a Makinavaja, a Mortadelo...me has arrancado de nuevo una lágrima. Gracias Miniyo.

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  2. Tengo que decir que yo también en mi infancia quedé absolutamente fascinado por un TBO de Superlópez: "El Señor de los Chupetes". Me lo prestó un vecino y me dejó alucinado. Ese metro avanzando hacia el Centro de la Tierra, esos chupópteros negros (Chupechán, Chupechín, etc.) Años después, en mi adolescencia, leería El Señor de Los Anillos y comprendería la fuente de inspiración de Jan.

    Después de El Señor de los Chupetes también leí alguno más, como La Semana más Larga (fantástico lo del Parchelona-Fespañol), o el mítico de Los Cabecicubos (cuando en los 80 más fuerte pegaba el cubo de Rubik)

    Pues tengo un CD con un montón de cómics de Superlópez que te encantaría. ¡Que viva Jan!

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