No todos los dinosaurios se extinguieron

No hay evasión, sino autointrospección
No hay enfado, sino autocrítica
No hay desilusión, sino falta de ambición
No hay desidia, sino desenfoque
No hay dolor, sino necrosis

El meteorito cayó, pero no era suficientemente grande,
La nube atómica no pudo con todos, algunos sobrevivieron,
El impulso electromagnético borró las memorias e ideas, pero las más fuertes persistieron, ancladas en lo más profundo del subconsciente irracional

Como dijo nuestro filósofo, el invierno el alma llega sin que te des cuenta y lo come todo, lo engulle, la travesía gris y fría se instaló, pero no para quedarse.

A la primavera, a la luz del sol que quema, de la sangre que corre y fluye, de las ideas que bullen y las neuronas que conectan...la serpiente muda su piel, el lagarto calienta su cuerpo y su mente se proyecta de nuevo, por encima de dificultades, incompresiones, injusticias e interpretaciones...porque solo el lagarto es responsable de sus emociones y sus consecuencias.

Haciendo mías, palabras que no son y que han provocado más de una catársis en este grupo hace años...recito de nuevo el hechizo, comienzo el ritual y tomo prestado el derecho a decir:

We should see the gates by mornin'
We should be inside by evening,

sun sun sun
burn burn burn
burn, burn, burn,
i will get you
soon,
soon,
soon

i am the lizard king
i can do anything